Hace unos días me llevé una agradable sorpresa cuando, hojeando el libro de "Martha Stewart's Baking Handbook", encontré esta receta que en el libro aparece como "Seville Olive-Oil Wafers" y pensé: "Qué lejos han llegado las Tortas de Inés Rosales!"
La verdad es que no me extraña...quién se puede resistir a su textura crujiente, al sabor delicioso de un buen aceite de oliva virgen y a la combinación del anís y el sésamo?
Y como soy de las que no se resisten, me faltó tiempo para sacar los ingredientes de la despensa y empezar a hacerlas, con un poco de miedo al fracaso pero con toda la confianza que me merece Martha Stewart, y es que sus recetas están bien explicadas y comprobadas, núnca he tenido problemas con ellas.
INGREDIENTES:
200 g. de harina común
40 g. de semillas de sésamo
3 cucharadas de azúcar y un poco más para espolvorear
1 cucharada de anís en grano
1 cucharadita de levadura Royal
1/2 cucharadita de sal
120 ml. de aceite de oliva virgen
60 ml. de agua helada
2 claras de huevo L batidas hasta que espumen
Precalentar el horno a 200º.
Mezclar en un bol la harina, levadura, anís, sésamo, sal y azúcar.
En otro bol poner el aceite y el agua helada; añadir a la mezcla de harina y batir justo hasta que se forme la masa.
Formar bolitas del tamaño de una pelota de ping pong con la masa e ir poniéndolas de dos en dos (separadas por lo menos 10-15 cm) sobre un papel de horno con otro por encima y pasarles el rodillo hasta que queden planas. Quedarán ovaladas.
Pincelarlas con las claras de huevo batidas y espolvorear bastante azúcar por encima.
Hornearlas durante 6-8 minutos, hasta que los bordes estén dorados.
Es conveniente girar las tortas a media cocción para que se hagan de manera uniforme.
Sacar del horno y dejar enfriar completamente en una rejilla.